Un haiku al día. Una nueva experiencia con cada amanecer…
Casi todos los amores terminan y dejan ese sabor agridulce en los labios, el mismo que se siente cuando lees este haiku.Un abrazo.
Muchas gracias Lidia. Era lo que estaba buscando, transmitir esa sensación para recordar que, en cierto modo, también nos hace sentir vivos.Abrazos.
Aprender a decir adiós es algo que creo que nunca aprenderemos, al menos sin que duela.Bonito haiku con sabor agridulce, como dice Lidia.
Tienes toda la razón. Siempre es un momento doloroso el decir adiós.Muchas gracias Alice.
Casi todos los amores terminan y dejan ese sabor agridulce en los labios, el mismo que se siente cuando lees este haiku.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Lidia. Era lo que estaba buscando, transmitir esa sensación para recordar que, en cierto modo, también nos hace sentir vivos.
EliminarAbrazos.
Aprender a decir adiós es algo que creo que nunca aprenderemos, al menos sin que duela.
ResponderEliminarBonito haiku con sabor agridulce, como dice Lidia.
Tienes toda la razón. Siempre es un momento doloroso el decir adiós.
EliminarMuchas gracias Alice.